Siria es un país que te hace sentir nada mas pisar sus calles antiguas como si hubieras sido teletransportado al pasado, como si estuvieras visitando la Siria de hace 500 años... Los puestos de verduras, las mujeres con sus tùnicas en las que a duras penas puedes verles sus bellos ojos negros, sus mansiones damacenescas....Un viaje a Siria te descubrirá entre otras muchas, sus grandes joyas como Damasco y Palmyra. Os invitamos a acompañarnos en el recuerdo de este bonito viaje.
Hoy en día, las afueras de las murallas de Damasco son una urbe caótica de luz y ruido con el sonido de los taxis dentro de un trafico infernal y miles de puestos de electrónica e informática...en cambio tras atravesar las murallas encuentras ese sitio inalterable al tiempo y la tecnología con sus mezquitas, bazares, cuentacuentos, barrio cristiano...
Para mi lo mejor que tuvo este viaje a Oriente Medio visitando Jordania y Siria, fue descubrir Siria y su perla Damasco, ciudad antigua donde las haya, que goza aun de una buena salud para el turista el cual se encuentra aquí un lugar casi virgen sin ordas de japoneses.
Retrasado 12 horas por la Royal Jordanian. Nos proporcionaron un hotel a 5 minutos de la terminal en Amman, el hotel aunque siendo de 4 estrellas alguna le faltaba. También teníamos derecho a la cena. El vuelo ha sido los 40 peores minutos aéreos de mi vida. El avión a falta de 15 minutos para aterrizar cogió una tormenta de arena. Se empezó a zarandear y había momentos en los cuales estábamos a muy pocos metros del suelo. La gente se puso muy nerviosa y en uno de los zarandeos comenzó a gritar. No se lo recomiendo a nadie, sobre todo porque de Amman a Damasco hay solo 3 horas en coche y aunque estés 2 horas más en la aduana Siria, no compensa el susto que se pasa cuando se coge una tormenta de arena.
Es un hotel muy nuevo pero a las afueras de Damasco. Tiene vistas a la montaña y cajero automático en recepción. Paran taxis en la puerta. Lo peor es el servicio de catering. La comida es escasa y cuando se acaban las bandejas no las reponen (no es normal que en un buffet a las 8 de la noche no quede apenas nada). Para el desayuno igual, los camareros no te reponen los cubiertos de las mesas. Yo la verdad es que si puedo no vuelvo a ese hotel. Prefiero uno más sucio y céntrico aunque con mejor atención del personal a este. Tiene centro comercial a 10 minutos andando.
Allied Tours, se portaron mucho mejor que los Jordanos, el guía llamado Zafer aunque algo mandón es un enamorado de su país que se desvive en mostrarte su forma de vida. Estaba pendiente de nosotros en todo momento.
Fuimos al día siguiente de llegar a Siria. Íbamos en una furgoneta con el guía y el conductor. Esta a 3 horas de Damasco. Paramos a mitad de camino en un puesto beréber donde vendían refrescos. El guía era amigo de ellos y nos enseño su casa, su pozo y nos presento a esta amable gente. Vimos a los niños pequeños (no estaban aun en edad escolar) y jugamos con ellos. Les repartimos caramelos y la experiencia ha sido una de las mejores de nuestra vida con esta gran familia beréber.
Antes de llegar hay una intersección con camino a Bagdad. El guía paro para que hiciéramos fotos del cartel de carretera....menos mal que no continuamos...
Llegamos a Palmyra y nos estuvo explicando todos las construcciones que aun están en magnifico estado. Esta ciudad es preciosa. Lo único malo eran los niños con las motos pasando entre las ruinas para intentar venderte cosas. Se lo comentamos al guía y este nos dijo que el problema es que cuando llega la policía estos se marchan corriendo. Una vez realizada la visita paramos en uno de los dos restaurantes locales y al finalizar retorno a Damasco.
Allí en Palmyra, cuando compras las entradas hay un hombre vendiéndote libros con la historia y dibujos de la ciudad envuelta en el fantástico oasis (para los amantes de las colecciones de libros de viajes).
He dejado esta ciudad para el final ya que en mi corazón lucha contra Estambul por el primer puesto como ciudad más maravillosa del mundo. La verdad es que no se entre cual de las dos decidirme, solamente sé que a ambas he de volver.
Antes de entrar en el casco antiguo, visitamos el Museo Nacional de Damasco en el que se encuentran los restos de la civilización persa (los que dejaron los franceses ya que no pudieron transportarlo debido a su gran tamaño). Este museo bien merece una visita y allí podrás ver las puertas de entrada del Palacio de Dario.
Tras la visita al Museo nos fuimos camino al Barrio Antiguo de Damasco. Esta visita se realiza toda a pie dentro de la muralla.
La principal entrada de la muralla te deja directamente en el gran zoco cubierto de Damasco y fuimos bajando por este a través de la gente. En el techo se pueden observar pequeños agujeritos fruto de las balas contra los franceses.
El guía prosiguió explicándonos cosas sobre su cultura. El mismo nos comento que era musulmán no practicante y que estaba divorciado. Se cruzo con dos chicas y se volvió para nosotros y nos comento que esas chicas eran prostitutas y que en las reconocía por la forma de pintarse la cara y de andar de un lado a otro. Nosotros nos fijamos en las chicas, pero la verdad es que nos parecieron igual que las otras.
Fuimos bajando por el zoco y nos detuvimos en la heladería mas famosa de allí "Bakdash" en la cual desde hace mucho tiempo realizan el helado de pistacho manualmente. Nos enseño también la sala romántica, que es un patio cubierto por una enredadera de flores rojas. Ese día no tomamos helado pero el día libre de Damasco sí. Dos helados 100 liras sirias.
Por cierto el cambio de la moneda en Siria era de 1 euro igual a 78 liras.
Siguiendo la arteria principal de este gran zoco llegamos a la mezquita Omeya.
Aquí las mujeres deben de ir cubiertas hasta los pies, no basta solo con pañuelo en la cabeza sino que deben de ponerse una túnica hasta los pies. A mi me obligaron a ponerme una a pesar de ir con pantalón y camisa de manga larga...yo observaba a las locales e iban solamente con el pañuelo...pero no es cuestión de discutir con ellos.
Visitamos todos los exteriores de la mezquita. Realmente bonita y recuerdan en cierto aspecto a la catedral de Córdoba por la forma de sus arcos y su peculiar estilo.
Fuimos a verla por dentro cuando comenzó la oración. Yo he visitado algunos países árabes pero aun no había visto una oración y la verdad es que me impresiono. El guía y mi marido fueron por el lado de los hombre y a pesar de los esfuerzos del guía para que yo los acompañara, no me dejaron y tuve que ponerme en el lado de las mujeres. La verdad es que me impresiono estar allí dentro durante la oración.
Salimos de aquí muy emocionados por haber podido ver la mezquita omeya cuando seguimos nuestro camino. El guía nos llevo a una mezquita en la cual descansaban los restos de la nieta de Mahoma (Mezquita Chiita Saida Ruqqaya). Y si ya creí haber visto lo mejor de Damasco estaba muy equivocada. Este sitio era alucinante, todos los techos estaban cubiertos de espejos y en el centro estaba la tumba de dicha nieta. Las mujeres aquí también deben de llevar túnica hasta los pies y entran por un sitio diferente a los hombres.
Una vez nos reunimos en el interior, el guía nos explico que era una mezquita chiita y presenciamos el rezo de estos. Es increíble el nivel de abstracción al cual llegan durante los rezos, en los cuales se ponen a llorar desconsoladamente y a infligirse golpes en el pecho.
La mezquita es de una belleza sin igual. La más bonita que he visto nunca (supera a la mezquita azul de Estambul). Las fotos no le hacen justicia.
Proseguimos hacia el barrio cristiano. Nos paramos en una teteria en la cual al atardecer el famoso cuenta cuentos de Damasco deleitaba a todos. Cuando fuimos solos estuvimos allí durante 2 horas tomando té y fumando una deliciosa shisha de anís. 2 tes + shisha 200 liras.
Durante el camino nos deleitamos con las mansiones damacenescas símbolo del antiguo esplendor de una de las ciudades más antiguas del mundo. Llegamos a la iglesia de Sant Ananias y la verdad es que ver la estructura antigua de la época es increíble.
Iglesia de Sant Ananias
Ya terminamos el tour saliendo por el otro lado de donde habíamos comenzado en la mañana y viendo la parte final de las murallas.
Durante ese día comimos en un sitio al cual nos llevo el guía. Nos costó la comida 1300 liras con platos variados, humus, y un guiso en cazuela que combinado con arroz estaba muy rico. De bebida nos pedimos la especialidad de la casa: zumo de limón con hierbabuena y miel. Según el guía es una de las bebidas más famosas de allí.
También nos paramos en una pequeña tienda de mosaicos de un chico que había estado estudiando la técnica en Toledo. Confeccionaba los mosaicos que puedes ver en Granada. Compramos un marco para fotos por 300 liras. Después ese mismo marco lo vimos pero mucho más caro.
Finalizamos con una visita a una montaña cercana para ver la ciudad desde allí. Las vistas eran inmejorables a Damasco!!!
Y eso fue nuestra maravillosa visita guiada por Damasco, el guia nos propuso llevarnos al día siguiente a Aleppo pero nos gusto tanto la ciudad que no quisimos movernos de allí en el día libre. Este lo empleamos para pasear por sus grandes zocos (te pierdes en ellos), fumar shisha frente a la mezquita Omeya viendo el ir y venir de locales y realizando un buen shopping de mantelerias bordadas y demás souvenirs varios.
A la hora del almuerzo y sin encontrar ningún restaurante marcado por la Lonely planet cerca, nos metimos en el primero que encontramos.
Se llama Old Damascus Restaurant y se encuentra para que os situéis al final del gran bazar cubierto te encuentras de frente la mezquita omeya, pues bien, gira a la izquierda y anda 2 minutos y te lo encontraras en la acera de la derecha. La dirección es Al ANSI Street. Entras a él y es como un edificio, el restaurante está en la 2ª planta.
Cuando lo vimos dijimos "nos van a dar la clavada del siglo". Un sitio magníficamente decorado, con una fuente en el centro y una banda de música tocando ritmos árabes. Teníamos 3 camareros para los dos. No tienen carta en ingles y solamente el maître habla algo de ingles. El nos estubo diciendo platos y pedimos lo que más o menos pensábamos que nos iba a gustar:
Ensalada (la mejor que he comido allí)
Plato de patatas fritas
Verduras agrias de las que ellos ponen
Plato gigante de arroz con pasas, piñones y pollo asado
2 zumos de naranja roja
1 botella agua grande
Un café amargo para la digestión ( te deja la boca dormida del mal sabor pero es buenísimo para las digestiones, apenas parece que te has comido esa exageración de comida).
Todo ello por el módico precio de 869 liras. No nos lo podíamos creer lo baratísimo que fue. Pensar con son 11 o 12 escasos euros esa pedazo de comida con tu musiquita y en un restaurante tan bonito.
Bueno sitio es magnífico o por lo menos a mi me encanto!!
Proseguimos con el shopping:
En el bazar principal las compras están más caras que en las calles paralelas. Son difíciles de regatear ellos y a pesar de mis esfuerzos no encontré ninguna tienda de precio fijo (salvo las del barrio cristiano). Estas fueron nuestras compras:
1 kg de dulces de frutas: 400 liras
100 gramos de rosas para infusión: 100 liras
200 gramos de pistachos: 130 liras
200 gramos de anacardos fritos: 130 liras
Mantelería bordada para 12 personas: 1350 liras (y aquí seguro que nos clavaron, fue en Oriental Handicrafts Hamidia Market, al final del bazar y entre porque entraban muchas autóctonas a comprar)
2 Cojines: 400 liras
Otra mantelería igual que la anterior pero en comercio perdido en una de las paralelas: 1200 liras
Bolso bereber (tienda enfrente de old Damascus Restaurant) 300 liras
Bolso de piel con piedras y bordados en tienda en barrio cristiano 500 liras
Monedero bordado en barrio cristiano 350 liras
Tabaco para shisha 800 liras 5 paquetes (lo sacamos más barato en Jordania, con lo cual creo que aquí por 50 liras puedes sacarlo más que de sobra.
Por cierto, para compras el barrio cristiano tiene tiendas con precios puestos y compras al precio local
Por 100 liras te tienen que llevar a la parte más alejada de la ciudad y de sobra es. A pesar de negociar el precio nos ponían el taxímetro y normalmente cuando llegábamos al hotel no solía pasar de las 60 liras con atasco incluido. En la puerta del zoco no bajaban de 150 liras, pero si andas un poco más abajo lo consigues por 100 liras. Nuestro guía nos decía que nos montáramos y que al llegar le diéramos 100 liras y que si el taxista no estaba de acuerdo que nos diera igual, que le diéramos el dinero y nos bajáramos del taxi.
Curiosidades
Cuando los taxistas nos preguntaban que de donde éramos y les decíamos que de Málaga ni la conocían, pero cuando decíamos que estaba cerca de Córdoba y Granada eran las palabras claves para comenzar con una amena conversación. Se emocionaban algunos y nos decían que nosotros teníamos sangre árabe. La otra palabra clave es Andalucía, surtía el mismo efecto que las anteriores. A los andaluces que vayáis por allí probarlo y ya me contareis luego que tal fue la conversación.
Como costumbre tienen la de conducir de maneras muy peculiares: hablando por el móvil, comiendo, bebiendo agua...y la mejor es cuando están manteniendo una conversación contigo y sueltan el volante se giran y te miran para hablar, todo ello mientras conducen...y tú lo único que puedes hacer es contar los segundos que el volante pasa sin manos y pedirle a Ala que cuide de nuestras almas...da mucho respeto y ya a uno le tuve que indicar que cogiera el volante (tras unos eteeeeerrrnos segundos).
Espero que os haya animados a algunos a visitar este increíble país y casi desconocido para los españoles llamado Siria. Yo pienso volver porque me he dejado ciudades tan maravillosas como Aleppo, Malula, el Crac de los caballeros, Bosra y su magnifico teatro romano...y además nuestro guía se ha ofrecido a hacernos el mismo un tour por todo su país enseñándonos hasta el ultimo rincón ya que "aunque Jordania tiene Petra y Jerash, Siria tiene 10000 petras y jerash en su interior", esa eran las palabras de nuestro buen guía Zafer.
TAMBIÉN OS PUEDE INTERESAR:
Hoy en día, las afueras de las murallas de Damasco son una urbe caótica de luz y ruido con el sonido de los taxis dentro de un trafico infernal y miles de puestos de electrónica e informática...en cambio tras atravesar las murallas encuentras ese sitio inalterable al tiempo y la tecnología con sus mezquitas, bazares, cuentacuentos, barrio cristiano...
Para mi lo mejor que tuvo este viaje a Oriente Medio visitando Jordania y Siria, fue descubrir Siria y su perla Damasco, ciudad antigua donde las haya, que goza aun de una buena salud para el turista el cual se encuentra aquí un lugar casi virgen sin ordas de japoneses.
Datos prácticos de nuestro viaje a Siria
Vuelo Amman-Damasco
Retrasado 12 horas por la Royal Jordanian. Nos proporcionaron un hotel a 5 minutos de la terminal en Amman, el hotel aunque siendo de 4 estrellas alguna le faltaba. También teníamos derecho a la cena. El vuelo ha sido los 40 peores minutos aéreos de mi vida. El avión a falta de 15 minutos para aterrizar cogió una tormenta de arena. Se empezó a zarandear y había momentos en los cuales estábamos a muy pocos metros del suelo. La gente se puso muy nerviosa y en uno de los zarandeos comenzó a gritar. No se lo recomiendo a nadie, sobre todo porque de Amman a Damasco hay solo 3 horas en coche y aunque estés 2 horas más en la aduana Siria, no compensa el susto que se pasa cuando se coge una tormenta de arena.
Hotel Carlton
Es un hotel muy nuevo pero a las afueras de Damasco. Tiene vistas a la montaña y cajero automático en recepción. Paran taxis en la puerta. Lo peor es el servicio de catering. La comida es escasa y cuando se acaban las bandejas no las reponen (no es normal que en un buffet a las 8 de la noche no quede apenas nada). Para el desayuno igual, los camareros no te reponen los cubiertos de las mesas. Yo la verdad es que si puedo no vuelvo a ese hotel. Prefiero uno más sucio y céntrico aunque con mejor atención del personal a este. Tiene centro comercial a 10 minutos andando.
Compañía minorista
Allied Tours, se portaron mucho mejor que los Jordanos, el guía llamado Zafer aunque algo mandón es un enamorado de su país que se desvive en mostrarte su forma de vida. Estaba pendiente de nosotros en todo momento.
Palmyra
Fuimos al día siguiente de llegar a Siria. Íbamos en una furgoneta con el guía y el conductor. Esta a 3 horas de Damasco. Paramos a mitad de camino en un puesto beréber donde vendían refrescos. El guía era amigo de ellos y nos enseño su casa, su pozo y nos presento a esta amable gente. Vimos a los niños pequeños (no estaban aun en edad escolar) y jugamos con ellos. Les repartimos caramelos y la experiencia ha sido una de las mejores de nuestra vida con esta gran familia beréber.
Antes de llegar hay una intersección con camino a Bagdad. El guía paro para que hiciéramos fotos del cartel de carretera....menos mal que no continuamos...
Llegamos a Palmyra y nos estuvo explicando todos las construcciones que aun están en magnifico estado. Esta ciudad es preciosa. Lo único malo eran los niños con las motos pasando entre las ruinas para intentar venderte cosas. Se lo comentamos al guía y este nos dijo que el problema es que cuando llega la policía estos se marchan corriendo. Una vez realizada la visita paramos en uno de los dos restaurantes locales y al finalizar retorno a Damasco.
Allí en Palmyra, cuando compras las entradas hay un hombre vendiéndote libros con la historia y dibujos de la ciudad envuelta en el fantástico oasis (para los amantes de las colecciones de libros de viajes).
DAMASCO
He dejado esta ciudad para el final ya que en mi corazón lucha contra Estambul por el primer puesto como ciudad más maravillosa del mundo. La verdad es que no se entre cual de las dos decidirme, solamente sé que a ambas he de volver.
Antes de entrar en el casco antiguo, visitamos el Museo Nacional de Damasco en el que se encuentran los restos de la civilización persa (los que dejaron los franceses ya que no pudieron transportarlo debido a su gran tamaño). Este museo bien merece una visita y allí podrás ver las puertas de entrada del Palacio de Dario.
Tras la visita al Museo nos fuimos camino al Barrio Antiguo de Damasco. Esta visita se realiza toda a pie dentro de la muralla.
La principal entrada de la muralla te deja directamente en el gran zoco cubierto de Damasco y fuimos bajando por este a través de la gente. En el techo se pueden observar pequeños agujeritos fruto de las balas contra los franceses.
El guía prosiguió explicándonos cosas sobre su cultura. El mismo nos comento que era musulmán no practicante y que estaba divorciado. Se cruzo con dos chicas y se volvió para nosotros y nos comento que esas chicas eran prostitutas y que en las reconocía por la forma de pintarse la cara y de andar de un lado a otro. Nosotros nos fijamos en las chicas, pero la verdad es que nos parecieron igual que las otras.
Fuimos bajando por el zoco y nos detuvimos en la heladería mas famosa de allí "Bakdash" en la cual desde hace mucho tiempo realizan el helado de pistacho manualmente. Nos enseño también la sala romántica, que es un patio cubierto por una enredadera de flores rojas. Ese día no tomamos helado pero el día libre de Damasco sí. Dos helados 100 liras sirias.
Por cierto el cambio de la moneda en Siria era de 1 euro igual a 78 liras.
Siguiendo la arteria principal de este gran zoco llegamos a la mezquita Omeya.
Aquí las mujeres deben de ir cubiertas hasta los pies, no basta solo con pañuelo en la cabeza sino que deben de ponerse una túnica hasta los pies. A mi me obligaron a ponerme una a pesar de ir con pantalón y camisa de manga larga...yo observaba a las locales e iban solamente con el pañuelo...pero no es cuestión de discutir con ellos.
Visitamos todos los exteriores de la mezquita. Realmente bonita y recuerdan en cierto aspecto a la catedral de Córdoba por la forma de sus arcos y su peculiar estilo.
Fuimos a verla por dentro cuando comenzó la oración. Yo he visitado algunos países árabes pero aun no había visto una oración y la verdad es que me impresiono. El guía y mi marido fueron por el lado de los hombre y a pesar de los esfuerzos del guía para que yo los acompañara, no me dejaron y tuve que ponerme en el lado de las mujeres. La verdad es que me impresiono estar allí dentro durante la oración.
Salimos de aquí muy emocionados por haber podido ver la mezquita omeya cuando seguimos nuestro camino. El guía nos llevo a una mezquita en la cual descansaban los restos de la nieta de Mahoma (Mezquita Chiita Saida Ruqqaya). Y si ya creí haber visto lo mejor de Damasco estaba muy equivocada. Este sitio era alucinante, todos los techos estaban cubiertos de espejos y en el centro estaba la tumba de dicha nieta. Las mujeres aquí también deben de llevar túnica hasta los pies y entran por un sitio diferente a los hombres.
Una vez nos reunimos en el interior, el guía nos explico que era una mezquita chiita y presenciamos el rezo de estos. Es increíble el nivel de abstracción al cual llegan durante los rezos, en los cuales se ponen a llorar desconsoladamente y a infligirse golpes en el pecho.
La mezquita es de una belleza sin igual. La más bonita que he visto nunca (supera a la mezquita azul de Estambul). Las fotos no le hacen justicia.
Proseguimos hacia el barrio cristiano. Nos paramos en una teteria en la cual al atardecer el famoso cuenta cuentos de Damasco deleitaba a todos. Cuando fuimos solos estuvimos allí durante 2 horas tomando té y fumando una deliciosa shisha de anís. 2 tes + shisha 200 liras.
Durante el camino nos deleitamos con las mansiones damacenescas símbolo del antiguo esplendor de una de las ciudades más antiguas del mundo. Llegamos a la iglesia de Sant Ananias y la verdad es que ver la estructura antigua de la época es increíble.
Iglesia de Sant Ananias
Ya terminamos el tour saliendo por el otro lado de donde habíamos comenzado en la mañana y viendo la parte final de las murallas.
Durante ese día comimos en un sitio al cual nos llevo el guía. Nos costó la comida 1300 liras con platos variados, humus, y un guiso en cazuela que combinado con arroz estaba muy rico. De bebida nos pedimos la especialidad de la casa: zumo de limón con hierbabuena y miel. Según el guía es una de las bebidas más famosas de allí.
También nos paramos en una pequeña tienda de mosaicos de un chico que había estado estudiando la técnica en Toledo. Confeccionaba los mosaicos que puedes ver en Granada. Compramos un marco para fotos por 300 liras. Después ese mismo marco lo vimos pero mucho más caro.
ZOCO DE DAMASCO
Finalizamos con una visita a una montaña cercana para ver la ciudad desde allí. Las vistas eran inmejorables a Damasco!!!
Y eso fue nuestra maravillosa visita guiada por Damasco, el guia nos propuso llevarnos al día siguiente a Aleppo pero nos gusto tanto la ciudad que no quisimos movernos de allí en el día libre. Este lo empleamos para pasear por sus grandes zocos (te pierdes en ellos), fumar shisha frente a la mezquita Omeya viendo el ir y venir de locales y realizando un buen shopping de mantelerias bordadas y demás souvenirs varios.
A la hora del almuerzo y sin encontrar ningún restaurante marcado por la Lonely planet cerca, nos metimos en el primero que encontramos.
Se llama Old Damascus Restaurant y se encuentra para que os situéis al final del gran bazar cubierto te encuentras de frente la mezquita omeya, pues bien, gira a la izquierda y anda 2 minutos y te lo encontraras en la acera de la derecha. La dirección es Al ANSI Street. Entras a él y es como un edificio, el restaurante está en la 2ª planta.
Cuando lo vimos dijimos "nos van a dar la clavada del siglo". Un sitio magníficamente decorado, con una fuente en el centro y una banda de música tocando ritmos árabes. Teníamos 3 camareros para los dos. No tienen carta en ingles y solamente el maître habla algo de ingles. El nos estubo diciendo platos y pedimos lo que más o menos pensábamos que nos iba a gustar:
Ensalada (la mejor que he comido allí)
Plato de patatas fritas
Verduras agrias de las que ellos ponen
Plato gigante de arroz con pasas, piñones y pollo asado
2 zumos de naranja roja
1 botella agua grande
Un café amargo para la digestión ( te deja la boca dormida del mal sabor pero es buenísimo para las digestiones, apenas parece que te has comido esa exageración de comida).
Todo ello por el módico precio de 869 liras. No nos lo podíamos creer lo baratísimo que fue. Pensar con son 11 o 12 escasos euros esa pedazo de comida con tu musiquita y en un restaurante tan bonito.
Bueno sitio es magnífico o por lo menos a mi me encanto!!
Proseguimos con el shopping:
En el bazar principal las compras están más caras que en las calles paralelas. Son difíciles de regatear ellos y a pesar de mis esfuerzos no encontré ninguna tienda de precio fijo (salvo las del barrio cristiano). Estas fueron nuestras compras:
1 kg de dulces de frutas: 400 liras
100 gramos de rosas para infusión: 100 liras
200 gramos de pistachos: 130 liras
200 gramos de anacardos fritos: 130 liras
Mantelería bordada para 12 personas: 1350 liras (y aquí seguro que nos clavaron, fue en Oriental Handicrafts Hamidia Market, al final del bazar y entre porque entraban muchas autóctonas a comprar)
2 Cojines: 400 liras
Otra mantelería igual que la anterior pero en comercio perdido en una de las paralelas: 1200 liras
Bolso bereber (tienda enfrente de old Damascus Restaurant) 300 liras
Bolso de piel con piedras y bordados en tienda en barrio cristiano 500 liras
Monedero bordado en barrio cristiano 350 liras
Tabaco para shisha 800 liras 5 paquetes (lo sacamos más barato en Jordania, con lo cual creo que aquí por 50 liras puedes sacarlo más que de sobra.
Por cierto, para compras el barrio cristiano tiene tiendas con precios puestos y compras al precio local
Taxis
Por 100 liras te tienen que llevar a la parte más alejada de la ciudad y de sobra es. A pesar de negociar el precio nos ponían el taxímetro y normalmente cuando llegábamos al hotel no solía pasar de las 60 liras con atasco incluido. En la puerta del zoco no bajaban de 150 liras, pero si andas un poco más abajo lo consigues por 100 liras. Nuestro guía nos decía que nos montáramos y que al llegar le diéramos 100 liras y que si el taxista no estaba de acuerdo que nos diera igual, que le diéramos el dinero y nos bajáramos del taxi.
Curiosidades
Cuando los taxistas nos preguntaban que de donde éramos y les decíamos que de Málaga ni la conocían, pero cuando decíamos que estaba cerca de Córdoba y Granada eran las palabras claves para comenzar con una amena conversación. Se emocionaban algunos y nos decían que nosotros teníamos sangre árabe. La otra palabra clave es Andalucía, surtía el mismo efecto que las anteriores. A los andaluces que vayáis por allí probarlo y ya me contareis luego que tal fue la conversación.
Como costumbre tienen la de conducir de maneras muy peculiares: hablando por el móvil, comiendo, bebiendo agua...y la mejor es cuando están manteniendo una conversación contigo y sueltan el volante se giran y te miran para hablar, todo ello mientras conducen...y tú lo único que puedes hacer es contar los segundos que el volante pasa sin manos y pedirle a Ala que cuide de nuestras almas...da mucho respeto y ya a uno le tuve que indicar que cogiera el volante (tras unos eteeeeerrrnos segundos).
Espero que os haya animados a algunos a visitar este increíble país y casi desconocido para los españoles llamado Siria. Yo pienso volver porque me he dejado ciudades tan maravillosas como Aleppo, Malula, el Crac de los caballeros, Bosra y su magnifico teatro romano...y además nuestro guía se ha ofrecido a hacernos el mismo un tour por todo su país enseñándonos hasta el ultimo rincón ya que "aunque Jordania tiene Petra y Jerash, Siria tiene 10000 petras y jerash en su interior", esa eran las palabras de nuestro buen guía Zafer.
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Bueno, bueno, increíble viaje el que os montasteis... y por cierto, ya veo que el tema de Nueva Zelanda venía de lejos, eh?
ResponderEliminarjejeje esto es antes de...pero ya Paco tenia su polito comprado en Bangkok de NZ para ir haciendose el cuerpo
ResponderEliminarEste viaje me apetecía menos, pero después de leerlo y verlo he cambiado de opinión. Besoooos
ResponderEliminarPiluca nosotros no teníamos planeado verlo, solo hacer ruta por Jordania pero un buen amigo nos comento que Siria era 20.000 veces mas bonita que Jordania la que solo tiene como destacable Petra y poco mas. En cambio Siria tenia para ofrecer mucho! Lastima que en un tiempo no va a ser posible visitarlo.
EliminarMuchas gracias por pasarte por aquí y un fuerte abrazo
Hermosisimas imágenes .. millones de gracias por compartirlas
ResponderEliminarGracias Ricky! Me alegra mucho que te gusten!
EliminarUn abrazo
Como siempre digo, gracias a ustedes por compartir tan generosamente, estas maravillas, en relatos e imágenes. A las que algunos no tenemos acceso en la vida real! Muchas gracias Un abrazo !!!! :))
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras Soledad! Me alegro que te gusten nuestros relatos y en especial este de Siria. Un abrazo.
EliminarQue pena me dan ver las fotos de Siria. Yo también fui en el 2008 y no quiero imaginar lo que será ahora... Saludos
ResponderEliminarEl sentimiento es mutuo. Un país que apenas pudimos vislumbrar, con una gente maravillosa y que ahora se encuentra en la situación que esta...una autentica pena. Saludos.
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