Visita a los Lagos de Plitvice en Croacia congelados

A mitad de camino entre Zagreb y Zadar se encuentra la joya de la naturaleza por excelencia de un viaje por Croacia. El Parque Nacional de los Lagos de Plitvice cuenta con 16 bellos lagos de turquesas y verdes aguas rodeados de un precioso bosque de hayas. Nuestra visita al Parque Nacional de los Lagos de Plitvice estuvo marcada por la nieve que aunque hizo que no pudiéramos disfrutar de toda el área, nos dejo una estampa única e inolvidable de Plitvice nevado.

Una de las visitas más esperadas durante nuestro viaje por Croacia era al Parque Nacional de los Lagos de Plitvice. Tras dejar Zadar y tomar el camino hacia él nos dimos cuenta que el tiempo en el interior de Croacia era mucho más frio, quedaban atrás las soleadas jornadas que habíamos disfrutado como la de Dubrovnik.

Con la carretera completamente nevada, fuimos primero al apartamento que teníamos reservado. Este se encontraba en una cálida casita de madera rodeada de un paraje de ensueño nevado que nos hizo preguntarnos porque no habíamos elegido quedarnos un par de días más allí disfrutando de ella.

Nuestros anfitriones nos estuvieron informando sobre sitios para comer, comprar y les preguntamos si podríamos visitar los Lagos de Plitvice ese día. Nos comentaron que creían que no, ya que los caminos y las pasarelas de madera para acceder a los lagos se encontraban nevados y en muchos casos bajo el agua, resultando extremadamente resbaladiza su exploración.

Caminos sumergidos bajo el agua

Lo estuvimos pensando y decidimos que la peque se quedara allí ya que no nos fiábamos de meterla en una zona donde los caminos eran tan peligrosos y en la cual se podía poner a nevar en cualquier momento por lo que en esta excursión por Plitvice, solo la mitad del equipo pudo ir.

El Parque Nacional de los Lagos de Plitvice fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1979. Cuenta con una amplia zona de bosques y 16 lagos que al encontrarse en diferentes altitudes originan más de 90 cascadas. La mayor cascada del parque tiene una altura de 76 metros de caída libre. Abre todos los días de 8 a 17 horas.

Tienen varias rutas de diferentes duraciones que se realizan por senderos y puentes de maderas. En los lagos más grandes existen barcas para cruzarlos.

Como ya habían predicho nuestros anfitriones, solo se podía ver en los Lagos de Plitvice una pequeña parte ya que el resto del parque se encontraba intransitable: senderos cubiertos de nieve y pasarelas sumergidas bajo el agua.

Tras ser informados de esto y pasar por taquilla, comenzó el peligroso descenso a los lagos. Con escalones congelados que se tornaban resbaladizos a cada paso, se accedía finalmente al lago en donde las pasarelas estaban cubiertas de agua.

Pasarelas cubiertas de nieve

A pesar de todos los inconvenientes y si bien fue una decepción no poderlo visitar entero, las estampas nevadas de las cascadas y lagos formando una bella imagen invernal son difíciles de olvidar y bien merecían el pequeño sacrificio de no poder visitar todos los lagos de Plitvice.

Si queréis ver los Lagos de Plitvices en verano podéis pasaros por aquí, ¡son increíbles los colores verde esmeralda que tienen!